La transmitancia térmica, comúnmente conocida como el coeficiente U, es un concepto fundamental en el diseño y la construcción de edificaciones eficientes desde el punto de vista energético. Este artículo explora qué es la transmitancia térmica, cómo se mide, y por qué es crucial para lograr construcciones sostenibles que reduzcan el consumo energético y mejoran el confort térmico.
¿Qué es la transmitancia térmica?
La transmitancia térmica es una medida de la cantidad de calor que se transfiere a través de un material por unidad de área y por grado de diferencia de temperatura entre el interior y el exterior. Se expresa en vatios por metro cuadrado por grado Kelvin (W/m²K). En términos simples, cuanto menor sea el valor del coeficiente U, mejor será el aislamiento térmico del material.
Es siempre preferible que la transmitancia térmica sea lo más baja posible, ya que esto indica que una pared o cubierta tienen un buen nivel de aislamiento. En cuanto a la conductividad térmica, cuanto más baja, mejor; y en el caso de la resistencia térmica, cuanto más alta, mejor.
Para lograr esto, el grosor del material aislante es crucial: cuanto más grueso, mejor será el aislamiento. En un mismo material, si se aumenta al doble el grosor del aislamiento, también se duplicará la resistencia térmica que ofrece.
Importancia en la construcción sostenible
Eficiencia energética: Un valor bajo de transmitancia térmica significa que la edificación requiere menos energía para mantener una temperatura interior confortable. Esto se traduce en una reducción significativa de los costos de calefacción y refrigeración.
Confort térmico: Una buena aislación térmica evita las pérdidas de calor en invierno y el ingreso de calor en verano, lo que proporciona un ambiente interior más estable y confortable para los ocupantes.
Sostenibilidad ambiental: Al reducir el consumo de energía, se disminuyen las emisiones de gases de efecto invernadero, contribuyendo a la lucha contra el cambio climático. Las edificaciones con baja transmitancia térmica están alineadas con los objetivos de desarrollo sostenible y las normativas de eficiencia energética.
Normativas y Certificaciones: Muchas normativas de construcción y certificaciones de edificios sostenibles, como LEED (Leadership in Energy and Environmental Design) y BREEAM (Building Research Establishment Environmental Assessment Method), requieren cumplir con estándares específicos de transmitancia térmica para obtener la certificación.
Materiales y técnicas para mejorar la transmitancia térmica
Aislamiento térmico: Utilizar materiales con alta resistencia térmica, como el poliestireno poliuretano y lana mineral. En el caso del panel aislante Isocindu, al tener núcleo en poliuretano o poliisocianurato, sumado a los diferentes espesores, incluyendo 8”, se convierte en el protagonista del aislamiento térmico.
Ventanas de alta eficiencia: Instalar ventanas de doble o triple acristalamiento con tratamientos de baja emisividad (Low-E) y marcos con rotura de puente térmico.
Puentes térmicos: Minimizar los puentes térmicos en la estructura del edificio, que son puntos donde el calor se transfiere más fácilmente debido a la continuidad de los materiales conductores.
Diseño pasivo: Incorporar técnicas de diseño pasivo, como la orientación adecuada del edificio, el uso de sombras y la ventilación natural, para maximizar el rendimiento energético.
La transmitancia térmica es un parámetro crucial en el diseño de edificaciones sostenibles y eficientes desde el punto de vista energético. Comprender y controlar este factor ayuda a reducir los costos energéticos y mejorar el confort interior, contribuyendo a la sostenibilidad ambiental. Al seleccionar materiales y técnicas de construcción adecuadas, los arquitectos e ingenieros pueden diseñar edificios que cumplan con las normativas actuales y aporten a un futuro más sostenible.