La visión de las ingenierías y las consultorías sobre la construcción industrializada

La industrialización puede ayudar a descarbonizar el sector de la construcción: este fue el argumento principal en el que coincidieron los expertos que participaron en la mesa de debate “La visión de las ingenierías y las consultorías sobre la construcción industrializada”, que tuvo lugar durante el desarrollo de la jornada “OFFSITE=GREEN?”, organizada por Isopan y Manni Green Tech. En ella, Sofía Galán, Senior Façade Engineer de ARUP; Begoña López, CEO de Componentes y Unidades Constructivas; Carlos Rodríguez, Sustainability Manager de MACE Group y Albert Sagrera, socio de Societat Orgànica, dialogaron sobre cómo y a partir de qué recursos se conseguirá reducir la huella de carbono en la construcción.

Transformar el sector de la construcción 

Los ponentes abrieron el debate señalando que la industrialización, presentada como un modelo más sostenible que el convencional, no es todavía la solución definitiva a todos los problemas de sostenibilidad que acarrea la construcción. Desde el punto de vista de Carlos Rodríguez, para conseguir que la industrialización se convierta en el modelo más sostenible, es necesario que se produzca un cambio radical en el sector que transforme cada uno de los proyectos desde su concepción. Al mismo tiempo, la falta de un tejido industrial consolidado que pueda hacer frente a la demanda del sector es, según Begoña López, uno de los principales inconvenientes de la construcción industrializada en España.

Por su parte, Albert Sagrera apuntó que conseguir transformar la construcción mediante la adopción de un modelo a priori más sostenible debería implicar también el cierre de los ciclos de los materiales. Para ello, la sociedad debería empezar a abandonar el modelo industrial lineal adoptado desde hace unos 200 años y volver a recoger todos los residuos que se emiten y reconvertirlos en el mismo recurso del cual provienen. Para él, la arquitectura sostenible solo será posible si se produce un equilibrio entre medio y sociedad. Sofía Galán se mostró de acuerdo con su argumento y precisó que los proyectos que lleva a cabo utilizando metodologías propias de la industrialización se caracterizan precisamente por la circularidad y la flexibilidad de sus componentes.

Cambios necesarios en la normativa actual 

La optimización de los materiales de la construcción y las mejoras en su desarrollo también salieron a coalición durante el debate. Begoña López no se decantó por la preferencia de un material por encima de otros, ya que, en su opinión, cada industria se está esforzando por reducir sus respectivas huellas de carbono. Sofía Galán, que se declaró en contra de la demonización de los materiales, apostó por la necesidad de realizar análisis de ciclos de vida, coincidiendo así con Albert Sagrera, que también señaló que la optimización de los materiales debería ser transversal a lo largo de todo el proceso edificatorio. Asimismo, invitó a sus colegas a plantearse si las normativas vigentes tienen en cuenta verdaderamente las necesidades del sector de cara a evitar el sobreuso de materiales. 

Durante el desarrollo del debate, los expertos coincidieron en que otro de los aspectos cruciales a los que tiene que hacer frente el sector de la construcción actual son las normativas de edificación. Sofía Galán, que apuntó que el diseño de las envolventes tiene una influencia directa sobre el carbono operacional del edificio, recordó que en este ámbito los consumos energéticos se llevan regulando desde hace tiempo, mientras que la regulación del carbono embebido está todavía por explorar. 

De la misma manera, Carlos Rodríguez recalcó que, alrededor del 60% de la huella de carbono que se produce en el sector residencial pertenece al carbono embebido. Para reducir estos niveles, insistió en el peso fundamental de realizar análisis y mediciones sobre los impactos en el medioambiente. En este sentido, subrayó que la construcción convencional en España está rodeada de muchas complejidades y que en la mayoría de casos no permite llegar al detalle, mientras que la seriación que propone el modelo industrializado podría facilitar llegar a los datos de forma mucho más directa y eficaz.