Leaf es la tecnología pensada por Isopan que garantiza la reducción de los derroches energéticos.
¿Cómo se puede disminuir el uso de los recursos y favorecer la protección del medio ambiente? Son dos preguntas fundamentales para garantizar la perfecta transición hacia la economía verde.
La investigación de Isopan responde a esta doble necesidad ofreciendo a los constructores y diseñadores de proyecto todos los beneficios de la solución Leaf.
La tecnología Leaf es fruto de los estudios realizados por el departamento de investigación y desarrollo de Isopan en el ámbito de los paneles sándwich y aislantes.
Se trata de una idea que tiene como fin garantizar las mejores prestaciones en términos de aislamiento térmico de los edificios y de las cámaras frigoríficas.
Ya esto bastaría para apreciar su utilidad, al ser una herramienta fundamental para garantizar la cadena del frío en la gran distribución.
Pero aún hay más, y el análisis de los aspectos adicionales del Leaf permitirá apreciar todas las características que determinan su importancia en el campo de la innovación de los productos para el aislamiento.
La tecnología Leaf surge del deseo de Isopan de hacer que las técnicas de construcción sean más adecuadas para las necesidades de protección medioambiental.
Han quedado atrás los tiempos en los que se prestaba una atención escasa o nula al impacto de la actividad humana en la naturaleza, y se ha ido consolidando cada vez más una visión del mundo orientada a adaptar las necesidades humanas a la protección del medio ambiente.
Se trata de un tema muy importante para quienes, como Isopan, desean proponer soluciones de vanguardia en el campo del diseño y la construcción de última generación.
Leaf es la manera en la que la empresa responde a estas necesidades, garantizando excelentes estándares de calidad en el campo del aislamiento térmico que, al mismo tiempo, sean capaces de respetar el ecosistema.
Es precisamente este el rasgo distintivo de los paneles sándwich con tecnología Leaf: permiten el mantenimiento de la temperatura dentro del edificio gracias a las excelentes propiedades aislantes de su espuma de poliuretano, con una mejoría de las prestaciones del aislamiento térmico respecto a las soluciones presentes en el mercado.
Decíamos que la espuma de poliuretano es el secreto de la tecnología Leaf. Y en efecto es exactamente así. Leaf es un gran aliado para los constructores y responsables de proyecto porque permite mejorar las prestaciones del material aislante, reduciendo el valor de conductividad térmica de la espuma de poliuretano.
Todo ello se traduce en un notable ahorro de energía que se puede cuantificar en una dispersión térmica reducida en un 20% respecto a los demás paneles con el mismo espesor disponibles en el mercado.
La consecuencia es una eficiencia notable del edificio, tanto en términos de consumo como de aislamiento.
La dispersión térmica reducida no es el único beneficio garantizado por la tecnología Leaf.
Esta solución también es apreciable por:
Reducción del espesor de los paneles: al garantizar un menor grado de dispersión térmica, Leaf permitirá el uso de paneles más finos y ligeros con la misma transmitancia térmica U.
Esto significa ventajas de gestión, facilidad de uso y disminución de los derroches.
Tras analizar los aspectos técnicos y las características intrínsecas de Leaf, ahora pasamos a hablar de las certificaciones ambientales que se puede obtener utilizando esta tecnología.
Antes presente en Europa con la etiqueta Declare, Leaf contribuye a obtener créditos necesarios para las certificaciones europeas LEED y BREEAM.
Se trata de dos certificaciones que se distinguen por su ámbito de referencia:
LEED se refiere a la construcción para uso no habitacional. Promueve el enfoque de la construcción ecosostenible con referencia a parámetros especiales, como la reducción de las emisiones de CO2 y el ahorro energético. Aplicado en 40 países, LEED es el protocolo reconocido a nivel mundial como garantía de protección medioambiental.
En cambio, BREEAM cubre tanto la construcción de viviendas como la comercial. Se trata de una certificación creada en 1988 por voluntad del Building Research Establishment (BRE) que goza de un amplio reconocimiento a nivel internacional en el desarrollo de las construcciones ecosostenibles. Aplicable tanto a nuevos proyectos como a planes de reforma, la obtención de la certificación BREEAM supone el cumplimiento de determinadas medidas de ecosostenibilidad no solo en la fase de diseño y construcción, sino también en la de mantenimiento.
Tras tratar las certificaciones que contribuye a obtener Leaf, pasemos a comprobar las ventajas adicionales derivadas del uso de esta solución.
Leaf es la tecnología con la que Isopan aumenta las prestaciones de sus paneles sándwich Isofrozen e Isofrozen HT.
Ambos entran en la gama de los paneles para el frío y son elementos de doble lámina aislados con espuma de poliuretano.
Gracias a Leaf, estos paneles sándwich representan la vanguardia para el diseño y la construcción de la cadena de frío y de la gran distribución.
Además, gracias a la excelente capacidad térmica que favorece el mantenimiento de la temperatura ambiente requerida, el panel sándwich con tecnología Leaf es el punto de referencia para el diseño de las cámaras frigoríficas utilizadas en la gran distribución.