Las salas blancas o “cleanroom”

Las salas limpias son entornos con atmósfera controlada, fundamentales para la industria alimentaria, farmacológica, química, automovilística y aeroespacial.

Las salas blancas o “clean-room” son áreas limpias, controladas y esterilizadas dentro de una temperatura controlada. Esto significa que el aire de su interior contiene una cantidad mínima de micropartículas de polvo en suspensión.

El funcionamiento de una sala blanca se basa en el principio de recirculación forzado del aire super-filtrado en una habitación sellada. Un sistema de ventiladores de techo a baja velocidad introduce en la habitación un flujo laminar de aire filtrado por una instalación externa y generalmente aspirada por parrillas de reanudación de correas al colocadas en el suelo. La pureza del aire en estos locales es hasta superior a la de un quirófano. Las personas que trabajan en estos espacios tienen que vestir con batas esterilizadas, cubre-zapatos, cofias y mascarillas. Además, todos los materiales y los productos introducidos en la “clean-room” tienen que estar descontaminados preventivamente.
Todos los alimentos destinados al consumo, solo pueden ponerse a la venta si siguen una serie de requisitos higiénicos y sanitarios muy bien definidos por normativa. La presencia de microorganismos en los alimentos puede alterar sus propiedades organolépticas y suponer un perjuicio económico a la empresa pero, sobre todo, puede comportar un riesgo para la salud de las personas que lo hayan consumido, causando intoxicaciones alimentarias e infecciones.

La normativa sobre las clean-room

Uno de los sectores en el que las salas blancas se utiliza es aquel en el que se realizan procesos de confección, embotellamiento y preparaciones que requieren entornos esterilizados, para evitar las posibles contaminaciones del producto. Las salas blancas son, por lo tanto, los laboratorios limpios dentro de los que la temperatura, la humedad y el sobrepresión están regulados en base a las necesidades individuales en conformidad con la normativa.

La normativa que reglamenta las salas blancas y los entornos asociados controlados es la UNE-EN ISO 14644-1:2016. La puesta al día el 16 de febrero de 2016 ha incorporado la “Clasificación de la limpieza del aire mediante la concentración de partículas” y el “Seguimiento para proporcionar evidencias del desempeño en relación con la limpieza del aire mediante la concentración de partículas”, fundamentales para valorar la limpieza del aire en las salas blancas. Establece, además, el número máximo de partículas permitido por metro cubico de aire por cada producto trabajado.

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