Los retos medioambientales de los que se habla en la Agenda 2030 para el Desarrollo Sostenible hacen mención también al sector de la construcción y todo lo que lo rodea. En este contexto, queda implícito que la mejora de la eficiencia energética, el ciclo de vida de los materiales, la durabilidad y la optimización de los procesos productivos son los pilares esenciales en los que se tiene que fijar la construcción para su desarrollo en el futuro.La alta especialización de las nuevas tecnologías empleadas en el sector ha permitido el desarrollo de metodologías como la construcción en seco, que se emplea tanto en obra nueva como en la rehabilitación de edificaciones ya existentes. En este último caso, estas nuevas técnicas permiten reducir significativamente tanto los tiempos en obra como la ocupación del espacio.
De hecho, siguiendo las técnicas de construcción en seco, se pueden definir y predecir con gran precisión las fases del trabajo, lo que se traduce en una reducción del tiempo de inactividad en la obra y en una reducción de costes. Esto se consigue gracias a que los componentes llegan ya fabricados a la obra, por lo que las fases de producción y montaje de la estructura de soporte, así como de las estructuras internas y externas, son ya superadas en la fase de ejecución del proyecto.
El uso generalizado de técnicas como Light Steel Frame representan un paso adelante en el sector de la construcción. Light Steel Frame, que se basa en el uso de perfiles prefabricados para la construcción de los elementos portantes horizontales y verticales, representa la evolución del sistema de construcción en seco del acero.
En resumen, la construcción en seco representa una evolución en el sector en términos de:
En los sistemas de acero construidos en seco, la necesidad de contar con un alto rendimiento energético y, por lo tanto, con mejorar el aislamiento térmico del edificio, ha llevado a potenciar las prestaciones de los paneles de revestimiento. De esta forma, se pretende alcanzar los más altos estándares en cuanto a energía y seguridad en los edificios.
Los sistemas de construcción convencionales utilizan el agua durante el proceso de montaje y materiales de unión que precisan de un período de secado tras su instalación. Por el contrario, la construcción en seco implica el uso de componentes industrializados u offsite que se instalan directamente en la obra mediante juntas mecánicas. Además, los materiales empleados en la construcción en seco, como el acero, destacan por su durabilidad, ya que son capaces de mantener inalteradas sus características técnicas y estructurales y requieren de poco mantenimiento.
Las principales ventajas que presentan las tecnologías de construcción en seco son:
En función del uso previsto del edificio construido siguiendo la tecnología offsite, se debe estudiar la estratigrafía de las cubiertas. En el sector industrial, se debe optar por soluciones planas como el panel Isodeck PVSteel de Isopan, que garantiza unas altas prestaciones en términos de aislamiento térmico, impermeabilización y resistencia. En cuanto a muros y paredes, se recomienda la instalación de capas de paneles y losas aislantes. La fachada, por su parte, puede suponer otra capa de alto rendimiento en lo que respecta a la eficiencia energética.
La envolvente del edificio puede estar formada por paneles ensamblados en seco que aumentarán las propiedades energéticas del conjunto de paredes. Para ello, pueden utilizarse paneles sándwich compuestos por dos capas externas metálicas que encierran en su interior una capa aislante de lana mineral o espuma de poliuretano con propiedades aislantes y acústicas. En estos casos, estaríamos ante el uso de paneles fonoabsorbentes y termoaislantes.
Las principales prestaciones físicas que presentan los paneles sándwich son:
También es preferible optar por materiales que dejan una baja huella medioambiental. Los paneles sándwich de la familia ADDMIRA, producidos con la tecnología LEAF de Isopan, no solo destacan por sus prestaciones técnico-físicas, sino que además minimizan su impacto sobre el medioambiente, garantizando:
Los paneles sándwich de Isopan pueden ir acompañados de certificaciones y etiquetas de calidad y sostenibilidad como FM Approved, EPD, BREEAM y Declare.
Con el fin de optimizar el uso de materiales específicos en la construcción en seco, la familia ADDMIRA de Isopan consta de tres gamas de productos.
La gama ADDVision abarca las soluciones de tipo industrial con paneles sándwich caracterizados por su gran ligereza y la variedad de posibilidades de configuración que lo convierten en un producto a medida, con módulos que oscilan entre 600 y 1100 mm y un espesor de entre 40 y 200 mm. El sistema ADDCross aporta elegancia a los revestimientos, con acabados realistas y de alta calidad. Por su parte, ADDWind es la solución para fachadas arquitectónicas ventiladas, ya que proporciona una amplia gama de colores y acabados superficiales combinados con una gran flexibilidad productiva y dimensional.
A la envolvente de un edificio se le exigen diferentes funciones, como soportar condiciones ambientales extremas, ciertas condiciones higiénicas, o mostrar un aspecto moderno en un contexto urbano en transformación. Por este motivo, la personalización de los paneles ADDMIRA se basa en una amplia elección de revestimientos exteriores para los que se emplean laminados metálicos de alta calidad.
Para garantizar una alta elegancia a la hora de diseñar la fachada, los paneles sándwich se instalan mediante un proceso de ensamblaje que utiliza anclajes de tipo mecánico sobre soportes metálicos con juntas machihembradas para ocultar los tornillos de fijación.
La ligereza de estos productos proporciona rapidez y sencillez, no solo durante la fase de transporte, sino también durante su manipulación en la obra y su posterior montaje. La versatilidad de aplicación permite su uso sobre cualquier estructura portante, lo que hace que este acabado sea adecuado especialmente para la rehabilitación de edificios ya existentes.
A día de hoy, la construcción en seco está cada vez más presente tanto en edificios públicos como privados, ya que además de racionalizar las fases constructivas y permitir la personalización del paquete estratigráfico, la modularidad de los componentes permite la reconfiguración de diferentes partes de los edificios si se deben producir rehabilitaciones o reformas posteriores.